FACIAL

Se trata de un tratamiento de regeneración celular a través de la bioestimulación, que restablece el funcionamiento del metabolismo cutáneo deteriorado por el paso del tiempo, deteniendo así el proceso de envejecimiento de nuestra piel. Consiste en la aplicación intradérmica de un complejo derivado del plasma del propio paciente, enriquecido con plaquetas que contienen una abundante cantidad de Factores de Crecimiento Plaquetario.

Este tratamiento se realiza en consulta y es poco doloroso, pues se efectúa con anestesia tópica y la paciente retoma su actividad normal de forma inmediata. Se suele realizar dos veces al año y se traduce en una piel más joven y luminosa, con una mejor textura, menor flacidez y una atenuación de las arrugas finas.

El tratamiento de lifting facial sin cirugía con hilos tensores, es una novedosa técnica para eliminar de forma inmediata la flacidez, tensando y rejuveneciendo el rostro.
Consigue devolver firmeza al óvalo facial y tensar la piel del cuello con un procedimiento muy sencillo y seguro.

Los hilos tensores son hilos muy finos de un material reabsorbible y biocompatible, la polidioxanona (PDO). La técnica, consiste en aplicar a través de una aguja-cánula muy fina un hilo plano a través del tejido celular subcutáneo y, al retirarla, la hebra queda tensada sin necesidad de anclajes. Cada hilo provoca una fibrosis progresiva en el tejido celular subcutáneo, lo que facilita su anclaje a la piel, dando como resultado una piel más firme y más turgente. La gran ventaja de los hilos es que favorecen la formación de colágeno de tipo I y II, el responsable de la firmeza de la piel.

El Peeling Químico es un tratamiento destinado a renovar las capas más superficiales de la piel y cuya finalidad es la corrección de diversos defectos de la misma como manchas, marcas de acné y arrugas finas.
Sobre la cara totalmente limpia, se aplican con un pincel especial un cóctel de sustancias que penetran en el epitelio con el objetivo de renovar las capas superficiales. El tiempo de aplicación no es superior a 15 min y no tiene ningún efecto secundario.
Las capas comienzan a renovarse desde el momento de la aplicación hasta varios día después. El paciente verá cómo la piel dañada se cae y deja paso a las capas más nuevas. La piel está más lisa, más tersa.
Es importante evitar la exposición directa al sol los días posteriores al tratamiento, pero el paciente puede hacer vida normal inmediatamente después de la aplicación del tratamiento.

Cada tipo de piel es diferente y por tanto, muestra diferentes signos dependiendo de factores como el tipo de vida, la edad, alimentación, sexo, ambiente y herencia.
Conocer en cada momento con exactitud el tipo de piel es fundamental, para elegir el correcto tratamiento.

Por medio de la Tecnología del Analizador Facial más innovadora, conseguimos una diagnosis muy precisa del estado dérmico, para saber con exactitud el nivel de hidratación de la piel, la cantidad de melanina o colágeno, así como la porosidad o el estado de las arrugas.